B.T. MAMÁ DE ANDRÉ.

Dar vida a un ser humano quién es la extensión de ti y se convierte en tu más grande amor es algo simplemente maravilloso, anhelarlo y no poder conseguirlo es realmente difícil y desalentador.

Aún recuerdo mi primera consulta con el Dr. Walters, un hombre serio y profesional, con un consultorio de ambiente agradable y personal amable y capacitado, en aquel entonces yo tenía 27 años de edad, ningún hijo ni embarazo en mi camino, pero la firme convicción de que mi esposo y yo queríamos ser papás.

Así bien, decidimos intentar, pero mi historia no fue fácil, tenía 1 año buscando embarazarme sin éxito y mi diagnóstico era endometriosis grado IV, mi única manera de obtenerlo era a través de una fertilización in vitro.

Sin embargo parecía que la vida se empeñaba en que yo no consiguiera mi tan anhelado sueño, pues durante 2 años realizamos 4 intentos, todos negativos, pase por distintos estados de ánimo, optimismo, miedo, angustia, tristeza, aún recuerdo haberle preguntado al Dr. Walters después de cada resultado negativo ¿Qué íbamos a hacer? y jamás olvidaré sus respuestas: ¡embarazarte! cabe resaltar que siempre confié en la capacidad y profesionalismo que caracterizaba al Dr., quien siempre estuvo al pendiente de todo mi proceso, contestando mis inquietudes a la hora que fuera, dándome un trato un tanto familiar.

Y bien, realizamos el quinto intento, y el resultado tan codiciado por fin llego, mis ojos pudieron ver una prueba de embarazo positiva y 9 meses después nació mi hijo, quien hoy es mi vida y complemento, quien está en este mundo gracias a la ciencia, a la capacidad de un equipo de profesionales en quien yo confié y hoy estoy infinitamente agradecida.

Deseo con todo mi corazón que tú, quien hoy estás leyendo mi testimonio alcances tu sueño, no dudes en luchar por lo que más anhelas, el resultado vale el tiempo y dinero invertido, y cuando sientas que ya no puedes más, cuando te agoten las visitas al hospital y las pruebas negativas, piensa en esa dulce voz que te va a llamar: Mamá.